Que nadie sea tan ingenuo de restar importancia a la detención, pues la fiscalía pedirá cárcel y mucho más allá de eso se trata de una grave persecución de los opresores que no nos permiten ni expresarnos con libertad cuando les decimos claro que estamos hartos. Es MUY grave que entren en nuestras casas y se lleven LIBROS de teoría comunista. Esto no es una detención por beber litros en un parque y contestar a un poli, va mucho más allá y banalizarla no ayuda para nada a combatir su represión.

Igual lo sueltan mañana en libertad condicional, pero quedará pendiente de juicio y la fiscalía fascista pedirá cárcel, el proceso no termina cuando te dejan en la calle.

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